Cada año me dejo caer por la feria del libro de Madrid y me sumo a la riada de gente que circula por delante de los cientos de miles de libros por leer. Siempre ando a la caza de ese libro que me llame la atención, que encienda una chispa que me haga llevármelo y pasar probablemente el siguiente mes paseando mi imaginación por sus páginas… (ese irresistible olor a libro recién comprado).
Pero este año he venido a la feria con un cosquilleo especial: un libro mío forma parte de esos cientos de miles de libros que esperan su momento para ser elegidos. Me infiltro como puedo en el río de personas y la corriente me lleva a la caseta 89 de la librería CAMELOT, donde Gregorio y Mª Ángeles han acogido “Érase un ratón” en sus estanterías… y yo que se lo agradezco. Bajo el rótulo del nombre de la caseta, reza: AVENTURA/CUENTOS INFANTILES – ILUSTRADOS/FANTASÍA: sí, sí, sí… 🙂 Veo a cientos, miles y miles de personas…pocos o ninguno se fijan en mi libro, pero está ahí, al alcance de su mano… y yo me siento igual de emocionado solo con esa oportunidad.